¡Caramba papá, como pasa el tiempo! Parece que fue ayer cuando correteaba por el patio del colegio y tú me vigilabas desde el banco de madera. Y míranos ahora: cada uno tiene que seguir su propio camino.
Ya que he terminado la universidad llevo idea de dedicarme a viajar por Europa durante algún tiempo antes de sentar la cabeza y empezar a buscar trabajo. Voy a necesitar una forma de ganarme la vida al fin y al cabo. Pero no te preocupes, vendré a verte por lo menos una vez al mes, puede que hasta te traiga flores algún día. Pero ahora me tengo que ir, el tren sale dentro de dos horas. No papá, no hace falta que te levantes. Ese ataúd tiene pinta de ser increíblemente cómodo.
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Gran historia...mejor final.
ResponderEliminar¿Sería una impertiencia preguntarle la edad aproximada que ronda en el relato?
ResponderEliminaraibaaaaa pero no me digas esto macho, que me habia enamorado del personaje del padre.
ResponderEliminarpero en realidad hay ke seguir tu propio camino,sino que cojones, voy a seguir el de bill gates
Gracias por vuestros comentarios
ResponderEliminarSiento las posibles desilusiones a lo largo de la lectura y a ti pichochin decirte que la edad es tan relativo como tu quieras alargar la vida estudiantil