Por Joe:
Comencé despacio, ensimismado, como tantas y tantas veces, clavando mis pupilas en aquella misteriosa superficie. Quería, necesitaba conocerla, pero no, no me dejo acercarme más. “Me la describieron sincera, transparente… sublime, pura,…como un recuerdo vacio que no escondía a nada ni a nadie detrás”.
Comencé despacio, ensimismado, como tantas y tantas veces, clavando mis pupilas en aquella misteriosa superficie. Quería, necesitaba conocerla, pero no, no me dejo acercarme más. “Me la describieron sincera, transparente… sublime, pura,…como un recuerdo vacio que no escondía a nada ni a nadie detrás”.
Pero por supuesto, como no podía ser de otra forma, sólo pude ver mi silueta… Aquel rostro impávido, cuasi transparente.
No era yo. Yo me conocía, y no era yo.
“Únicamente había visto mi reflejo, como el de los cientos y cientos de gentes que se habían cruzado en mi vida.”
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